En la economía moderna, la creación de deuda pública se justifica perfectamente en las siguientes situaciones

En la economía moderna, la creación de deuda pública está perfectamente justificada en las siguientes situaciones:

1. Durante el período de guerra:

La guerra moderna es muy costosa y no puede ser financiada en su totalidad a través de medidas fiscales. Porque, si solo se usan los impuestos, la producción se verá afectada negativamente por los fuertes impuestos directos y los grupos de ingresos fijos se verán gravemente afectados cuando se aumenten los impuestos indirectos.

Los préstamos públicos no tendrán tales consecuencias deseadas. La creación de deuda pública es, por lo tanto, un método mejor y más fácil de recaudar ingresos y transferir recursos del sector civil al militar.

2. En tiempos de depresión:

La creación de deuda pública se considera muy significativa para superar una depresión. Porque, durante una depresión, el aumento de los impuestos tendrá un efecto adverso en el incentivo para trabajar e invertir.

Pero, si el gobierno toma inversiones públicas, financiadas con préstamos, especialmente del sector bancario, el empleo, los ingresos y el nivel de demanda efectiva tendrán una expansión acumulativa. Además, durante una depresión, el fondo prestable es un exceso de oferta, que puede ser explotado fructíferamente a través de préstamos del gobierno que también ayudarían a sostener los mercados de capital.

3. Para cubrir los gastos sin precedentes:

Es posible que un gobierno tenga que pedir prestado para financiar un aumento repentino en sus gastos requeridos para enfrentar ciertos eventos fortuitos como inundaciones, hambrunas, epidemias, etc. que requieren obras de socorro.

4. Para frenar la inflación:

El endeudamiento público puede considerarse como un medio para aliviar la presión de la espiral inflacionaria en la economía, ya que al aumentar los préstamos públicos, el gobierno absorbe el poder de gasto excesivo de los suscriptores.

Pero, como muchos economistas modernos consideran acertadamente, los impuestos serían una mejor medida antiinflacionaria en comparación con las deudas públicas, porque en los préstamos públicos, los pasivos del gobierno aumentan si el gobierno no utiliza las sumas prestadas. Pero el excedente de los ingresos fiscales puede muy bien quedar inactivo en la tesorería del Estado para frenar la presión inflacionaria en la economía.

5. Desarrollo financiero:

En su mayoría, los países en desarrollo, en vista de la baja capacidad imponible de la economía y los menos recursos internos disponibles para fines de desarrollo, recurren a préstamos internos y externos como una fuente importante de financiamiento para el desarrollo.

Para efectuar una rápida formación de capital y acelerar el ritmo de la industrialización, India, por ejemplo, ha recurrido a préstamos públicos en mayor medida en los últimos años. Bajo la planificación económica, el endeudamiento público, por lo tanto, constituye un recurso financiero importante.

También en los países avanzados, los gobiernos recurren a préstamos para construir equipos de capital y programas de obras públicas como el desarrollo de carreteras, sistemas de riego, centrales eléctricas, etc. De esta manera, los préstamos públicos se están utilizando de manera productiva.