Notas breves sobre los estudios de liderazgo del estado de Ohio

En 1945, la Oficina de Investigación de Negocios de la Universidad Estatal de Ohio inició una serie de estudios sobre liderazgo. Estos estudios buscaron identificar dimensiones independientes del comportamiento del líder. Los estudios comenzaron con la premisa de que no existía una definición satisfactoria de liderazgo y no había una indicación precisa de las cualidades de un buen líder. Por eso buscó definir el liderazgo en términos de desempeño.

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Estos estudios identificaron dos dimensiones de liderazgo independiente denominadas estructura de iniciación y consideración que significaban más o menos lo mismo que el comportamiento de tarea y el comportamiento de relación de un líder.

La estructura iniciadora se refiere a la medida en que un líder puede definir y estructurar su propio rol, así como los roles de los subordinados en la búsqueda del logro de la meta. Incluye el comportamiento que intenta organizar el trabajo, las relaciones de trabajo y los objetivos. El líder caracterizado como alto en la estructura de inicio especifica la tarea que debe realizar cada miembro de su grupo, establece fechas límite, da instrucciones y ejerce presión sobre ellos para su cumplimiento.

La consideración se refiere al grado en que es probable que un líder tenga relaciones laborales que se caracterizan por la confianza mutua, el respeto por las ideas de los subordinados y el respeto por sus sentimientos. Muestra preocupación por la comodidad, el bienestar, el estado y la satisfacción de sus seguidores.

Un líder caracterizado como alto en consideración podría ser descrito como uno que ayuda a los subordinados en sus problemas personales, es amigable y accesible y trata a todos los subordinados como iguales.

Los Estudios del Estado de Ohio sugirieron que el estilo de liderazgo "alto-alto" (alto en la estructura de iniciación y en consideración) generalmente produce resultados positivos, pero hay excepciones que indican que los factores situacionales deben integrarse en la teoría.

Los estudios de Ohio tienen valor para el estudio del liderazgo. Fueron los primeros en enfatizar la importancia de la dirección de la tarea y la consideración de las necesidades individuales al evaluar el liderazgo. Este enfoque bidimensional disminuyó la brecha entre la orientación estricta de la tarea del movimiento de gestión científica y el énfasis en las relaciones humanas.