8 Estándares cuantitativos contra los cuales se puede medir el desempeño en una organización
Algunos de los estándares cuantitativos contra los cuales se puede medir el desempeño son:
El proceso de control comienza con el establecimiento de estándares de desempeño contra los cuales se pueden comparar las actividades de la organización. Estos son niveles de actividades establecidos por la gerencia para evaluar el desempeño. Estos estándares deben ser claramente especificados y comprendidos por todos los miembros de la organización sin ambigüedad.
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Deben definirse en términos medibles, siempre que sea posible, como las unidades físicas producidas por un período de tiempo, las ganancias que se obtendrán por unidad, etc. Los estándares u objetivos generales redactados de forma vaga, tales como "mejores habilidades" o "altas ganancias" son difíciles de interpretar y, por lo tanto, generan confusión y conflicto.
Por ejemplo, el objetivo de un agente de bienes raíces puede ser vender cuatro casas por mes. Luego puede planear el mes y monitorear su desempeño. De manera similar, un vicepresidente encargado de la producción puede tener el objetivo de mantener el costo de producción dentro del presupuesto asignado durante un período de tiempo. Al lograr tal objetivo, podrá monitorear los costos y tomar medidas correctivas donde sea necesario.
Como otro ejemplo, un profesor universitario puede tener el objetivo de cubrir diez capítulos de un libro durante un período de un semestre. Él puede planear su horario de enseñanza de acuerdo a esa meta. Estos estándares, metas y objetivos establecidos con precisión facilitan la comunicación entre todas las personas y esto facilita el control del proceso de control.
Hay situaciones en las que no es posible cuantificar estándares, como en el caso de la moral alta, las relaciones con la comunidad, la disciplina o la creatividad. En tales casos, se debe hacer todo lo posible para comprender completamente estos objetivos cualitativos y diseñar mecanismos de control que serían útiles para medir el desempeño en estas situaciones.
La mayoría de estos mecanismos de control serían de naturaleza subjetiva y las decisiones se tomarían sobre la base de la experiencia, las observaciones analíticas y los juicios intuitivos. Algunos de los estándares cuantitativos contra los cuales se puede medir el desempeño son:
1. Normas de tiempo:
El objetivo se establecerá sobre la base del lapso de tiempo en la realización de una tarea en particular. Podría ser unidades producidas por hora, número de páginas escritas por hora o número de llamadas telefónicas por día. Los gerentes utilizan estándares de tiempo para pronosticar el flujo de trabajo y el rendimiento de los empleados. El rendimiento estándar de los empleados también determina el alcance del plan de incentivos financieros.
2. Costes estándares:
Estas normas indican el gasto financiero involucrado por unidad de actividad. Estos podrían ser el costo material por unidad, el costo por persona y el costo de distribución por unidad y así sucesivamente. Los presupuestos se establecen para reflejar estos costos y proporcionan puntos de control monetarios para comparar los costos reales con los costos presupuestados.
3. Normas de ingresos:
Estos se relacionan con las recompensas financieras recibidas por una actividad en particular. Los ejemplos serían volúmenes de ventas por mes, ventas generadas por un vendedor por año y así sucesivamente.
4. Normas de cuota de mercado:
Este objetivo estaría orientado hacia el porcentaje del mercado total que una empresa desea retener o adquirir. Por ejemplo, una empresa puede querer aumentar su participación en el mercado en cuatro puntos porcentuales por año durante los próximos cinco años.
5. Normas de calidad:
Estas normas expresan los niveles de calidad esperados de un producto o servicio. Existen programas de control de calidad que monitorean el nivel de calidad de un producto. Estas pueden ser tolerancias dentro de las cuales la calidad puede ser aceptada. Por ejemplo, el transbordador espacial y los fabricantes de aeronaves tienen requisitos de producción sin defectos, mientras que otros productos pueden tener estándares de calidad menos estrictos.
6. Productividad:
Los estándares de productividad o cantidad se expresan en términos numéricos como el número esperado de artículos producidos por hora hombre o por actividad dada. Estos objetivos son la clave para la eficiencia operativa y se establecen sobre la base del desempeño pasado, el grado de mecanización, las habilidades y capacitación de los empleados y la motivación de los empleados.
7. Retorno de la inversión (ROI):
El retorno de la inversión es un estándar integral y útil, ya que involucra todas las facetas del negocio, como el volumen de negocios, las ventas, el capital de trabajo, el capital invertido; niveles de inventario en determinados momentos, costos de producción, costos de mercadeo, etc. Es una relación del ingreso neto al capital invertido. Es superior a la participación en el mercado como estándar porque una gran participación en el mercado no significa necesariamente mayores ganancias.
8. Normas cuantitativas de personal:
La moral y la dedicación del trabajador pueden medirse en cierta medida mediante algunos estándares cuantitativos. Estas normas pueden ser el alcance de la rotación de empleados, la cantidad de accidentes relacionados con el trabajo, el ausentismo, la cantidad de quejas, la calidad del desempeño, etc.
